El Complejo Arqueológico de Rúpac es conocido como el Machu Picchu de Lima, debido a la ubicación de sus restos, a 3400 metros sobre el nivel del mar, en la montaña, es perfectamente comprensible que desde esta zona pudieran dominar toda el área, tener una vista de todo y una posición estratégica, tal como lo hicieron los Incas cuando construyeron Machu Picchu.
Si por casualidad te encuentras en Lima y quieres vivir una experiencia increíble fuera de la ciudad, entonces Rúpac, el Lima Machu Picchu, es el lugar que estás buscando. El complejo arqueológico es impresionante, ya que cuenta con una maravillosa arquitectura que aún se mantiene después de tantos años, hermosos paisajes, un majestuoso atardecer y su famoso colchón de nubes.
Índice del Contenido
Ubicación
El sitio arqueológico de Rúpac se encuentra ubicado en el distrito de Atavillo Bajo, dentro de la provincia de Huaral, a 3.500 metros sobre el nivel del mar y a 145 kilómetros de la ciudad de Lima.
¿Cómo Llegar A Rupac?
Hay 2 formas de cubrir el trayecto en coche (privado o autobús), pero debemos realizar la parte de la caminata. No te preocupes, aquí cubriremos ambos sentidos y te daremos algunos consejos para afrontar el trekking si no estás acostumbrado.
Tour en coche privado
- Debemos tomar la carretera Panamericana Norte hasta la ciudad de Huaral.
- Tomamos la avenida de Los Naturales que nos llevará a la ruta que se dirige a la sierra.
- Luego de una hora de viaje llegaremos a un peaje.
- Antes de llegar al puente “Ing. Oscar Vargas Avendaño” verá un desvío que indica la zona turística La Florida – Pampas.
- A partir de aquí el camino se vuelve más complicado, ya que es muy empinado y de un solo carril.
- Asegúrate de tener el tanque lleno desde Huaral, porque la elevación hará que consuma mucho más y es posible que no entre en tus cálculos.
- Luego de una hora y media de viaje llegaremos a La Florida, donde debemos pagar la entrada a Rúpac con 10 soles (USD 2,50).
Autobús Y Tour Colectivo
- Nos dirigiremos a la Gran Terminal Terrestre en Plaza Norte y tomaremos un bus que nos llevará a la ciudad de Huaral.
- Luego tomaremos un bus hasta Las Pampas, cuyo pasaje promedio suele ser de 25 soles (USD 6) por persona.
- Luego de 2 horas de viaje llegaremos a La Florida, donde debemos pagar la entrada a Rúpac con 10 soles (USD 2,50)
Llegada a las pampas
Después de unos 10 minutos de pagar la entrada, hemos llegado en bus o auto, llegaremos al ‘Pueblo Fantasma’ de Las Pampas.
Finalmente, una vez en Las Pampas, podremos encontrar restaurantes y tiendas donde abastecernos antes de iniciar el trekking. El origen de que sea un “pueblo fantasma” se debe a que, hace mucho tiempo, sus habitantes decidieron trasladarse a otro lugar, dejando sus casas intactas.
Hoy en día, la ciudad se ve más como una atracción turística. Los vecinos de La Florida suben e instalan sus negocios de alimentación y turismo, ya que la ruta a Rúpac tiene como punto obligatorio Las Pampas, por lo que es una situación win-win entre locales y visitantes.
Ahora sí, ¡sin más! La parte del recorrido llega a pie hasta Rúpac. Podrás optar por ir por tu cuenta o contratar un servicio de guiado, además de tener la oportunidad de alquilar burritos para transportar tus cosas a la ciudad del fuego.
Caminata Y Acampada En Rúpac
La caminata será extenuante, por lo que siempre se recomienda ir con buena salud. Son 6 kilómetros de caminata que se pueden extender hasta 3 horas dependiendo de tu condición física, pero todo tiene su recompensa.
En el camino podrás observar un paisaje de ensueño y contemplar una cascada en tu camino. Una vez llegues a Rúpac tu recompensa será aún mayor, ya que serás recibido con un hermoso atardecer. Recuerde descansar un rato y luego reanudar para no perder el ritmo.
No te lo pienses mucho y monta tu tienda de campaña en la zona de acampada lo antes posible, ya que una lluvia sorpresa podría complicarte las cosas.
Colchón De Nubes En Rúpac
El colchón de nubes es posiblemente la razón por la que muchos interesados se enteraron de la existencia de Rúpac y se animaron a visitar el complejo arqueológico. Es, como su nombre lo dice, un colchón de nubes que se forma en la parte superior y nos da la sensación de estar sobre el cielo.
En general, suele formarse con frecuencia en enero y febrero. Sin embargo, puedes visitar el lugar en cualquier época del año y disfrutar de la misma manera los demás atractivos.
Complejo Arqueológico de Rúpac
El Complejo Arqueológico de Rúpac fue construido por los Atavillos, una de las culturas preincas más importantes de la provincia de Lima. Su propósito era crear un sistema de defensa desde las alturas, por lo que dominaban las cimas de las montañas que van desde los 3.500 a los 3.800 metros sobre el nivel del mar.
Hasta el día de hoy, las construcciones se mantienen intactas a lo largo de los siglos, por lo que se ha ganado el título de «Machu Picchu de Lima«. Podrás observar los kullpis (viviendas) y las chullpas (torres funerarias) en sus zonas de asentamiento. No solo eso, sino que también podrás identificar almacenes, chimeneas, patios y otros ambientes que se sabe que se mantienen después de tantos años.
Si te preguntas por qué la llaman “la ciudad del fuego”, es porque se dice que sus edificios habrían estado pintados de un rojo tan brillante que, al atardecer, la ciudadela parecía incendiarse. Aún se pueden encontrar pequeños vestigios que comprobarían el origen de aquel nombre.
Para terminar, ten en cuenta algunos consejos que te ayudarán en tu viaje: salir temprano hacia Huaral, llevar ropa abrigada y carpas o sacos de dormir especiales para montaña, tomar pastillas para el soroche, traer un paraguas y tratar de tener suficiente agua para el viaje.
Los mejores Tours en Perú
Muchas son las rutas que te llevan a Machu Picchu, pero ninguna como el Inca Trail Tours, el sendero peatonal más famoso de América. Luego de volar desde la capital del Perú, Lima, llegarás a Cusco para caminar durante cuatro días por un sendero entre bosques y densa niebla, escalones de piedra milenarios y descubriendo las ruinas de antiguas fortificaciones y ciudades incas, y todo el tiempo disfrutando de majestuosas vistas.